Destinos que conozco y que me gustaría conocer.
Esta mañana, al abrir el periódico, me he encontrado con la noticia de que el Abuelo se ha caído. Así llamábamos en Extremadura al alcornoque de 400 años de edad, 15 metros de altura y 20 metros de diámetro que hasta ayer era el vecino más anciano de la pequeña localidad de Toril. Lamentablemente, la sobreprotección ha tenido malas consecuencias, y es que al dejar de extraer su corcho cuando se le declaró oficialmente “árbol singular”, nuestro gigante se llenó de hongos y plagas.
Es curioso; hace tal solo unos días visité el Centro de Interpretación Reserva de la Biosfera que recientemente se ha inaugurado en este pueblo cacereño. Allí, el guía comentó que la edad real del Abuelo no podría calcularse con exactitud hasta que éste muriese y se pudiesen contar las anillas del interior de su corteza. Quién nos iba a decir que se desplomaría una semana después. Al menos, en el Centro de Interpretación podremos contemplar la representación del tamaño de su tronco. Como veis en la imagen, dentro de él caben unas veinte personas.
En Toril siempre nos quedarán las carreras de caballos celebradas en San Blas.